Aida Estévez es fundadora de la empresa “Como Darwin”, Socia y Directora del festival Silfest de Valdeorras y, entre otras de sus facetas, también ha sido mentora de nuestro Programa de Mentoring. Hoy conocemos un poco más a Aida de la mano de nuestra compañera Ana Lima.
Ana Lima – Desde que te conozco me pareces una persona todoterreno que seapunta a un bombardeo. Has sido mentora de nuestro Programa de Mentoring, fundadora de #CangasCOONET, Socia y Directora del festival Silfest de Valdeorras y, por si fuese poco, hace unos meses has emprendido y has fundado tu propia empresa, “Como Darwin”. Cuéntanos, ¿cómo lo haces y cuál es tu clave para compaginarlo todo?
Aída Estévez – Jajaja, buena pregunta, la verdad es que me encanta aprender cosas nuevas, cuestionarlo todo y aprender de lo que puedo o me dejan. Lo hago porque me motiva, a veces creo que veo el mundo con ansia de aprendizaje y me cuesta no promover o dejar pasar la oportunidad de lanzar un proyecto si es interesante.
Acerca del Programa de Mentoring, ya había sido mentora un par de veces en el Programa Impulsa de Pescanova y además el feedback había sido bueno así que vi la publicación de Igata y pensé, ¿por qué no? ¡La sorpresa vino cuando me aceptasteis! 😉
Con Cangas Coonet ocurrió de otra forma, partió de una necesidad propia. He nacido en O Barco de Valdeorras y llevo cinco años viviendo en Cangas, no conocía a nadie, para ir a cualquier sitio o escoger una empresa de reformas, no tenía ninguna referencia y no conocía a nadie que fuera emprendedor y que pudiera tomar como ejemplo de aprendizaje. Así que monté el grupo de networking, que después derivó en un grupo del Círculo de Jóvenes Emprendedores en el Morrazo, cuando hasta ese momento solamente estaba en Vigo.
Con el SilFest, la pasión es lo que me motiva a hacerlo. Me encanta la música y me encanta la zona de Valdeorras, es mi casa, donde están mi familia y amig@s de siempre. Lo hago de forma completa altruista por y para ell@s y después del currazo, mis socios y yo siempre decimos: “Este fue el último año, no lo volvemos a hacer” pero llega diciembre, nos juntamos y volvemos a caer, es como una droga y nuestro cerebro es sabio y solamente se acuerda de las cosas buenas, no del dinero que estás arriesgando, por ejemplo.
Como Darwin es otra historia, pero si lo que me preguntas es la clave, pues te digo: En estos momentos la clave es mi marido. Siempre se dice que detrás de un gran hombre, hay una gran mujer y en este caso, si no fuera porque fue él quien dijo “Yo paro, sigue tú” no sería capaz de hacer esto con dos peques de casi tres años. En breves se le acaba su reducción de jornada y veremos cómo hacemos… (aquí pondría el emoji del mono tapándose los ojos, jajaja)🙈
A.L. – ¿Qué te motivó o que te llevó a tomar la decisión de fundar Como Darwin?
A.E. – Hacía mucho tiempo que quería emprender, creo que la vena emprendedora corre por la familia Delgado y después de posponerlo algunos años por otros proyectos dentro de la compañía en la que estaba y por la maternidad, se alinearon los astros y decidí dar el salto.
Lo que me decidió a hacerlo fue que sentía que ninguna consultora se enfocaba en enseñar y ayudar a la pequeña y mediana empresa a cómo mejorar su eficiencia desde el punto de vista de aporte de valor al cliente.
Me gusta pensar que al acompañar a empresas familiares de pequeño tamaño estoy ayudando a que sean más competitivas y que a medio plazo puedan seguir generando negocio y por lo tanto contratando o dándoles mejores condiciones a sus trabajadores, pero de una forma eficiente y ordenada.
Este tipo de organizaciones son mucho más fuertes y flexibles de lo que creen, la polivalencia y capacidad de adaptación está en su ADN, solamente necesitan un empujoncito para ayudarlos a visualizar el gran potencial del que disponen.
A.L. – ¿Cuáles crees que son los principales retos a los que se enfrenta hoy en día una persona que tome la decisión de emprender?
A.E. – Son varios los retos a los que se pueden enfrentar, yo destacaría los siguientes:
El principal es económico, estamos en un entorno cambiante y nada, y cuando digo nada es nada, de lo que vas a prever va a ocurrir, así que ponte en la tesitura más desfavorable desde el punto de vista económico y a partir de ahí, crea el negocio. Tus costes van a cambiar puede ser que de un día para otro.
Por otra parte, creo que se ha idealizado al emprendedor. Sí que es cierto que eres dueño de tu vida, pero esa vida, en la mayor parte de los casos es muy esclava, al menos al principio, y puede ser que duela darse de bruces con la realidad. Por lo que la gestión de tu tiempo es importante.
Por último, está el reto de la diferenciación, hay miles de opciones en el mercado para el producto o servicio que vas a ofrecer, a no ser que sea muy novedoso o necesario, ¿cómo lo vas a vender? El hecho de hacer desarrollo de negocio es un gran desafío si no lo has hecho antes y puede ser que te lo lleves a lo personal y te desinfles.
A mayores hay otros retos, como la búsqueda de talento (algo que a mí me gusta y creo que se me da bien), o la soledad del emprendedor. Reconozco que esto último me echa para atrás, soy un ser sociable y prefiero trabajar en entornos con gente, lo bueno, es que estoy mucho con mis clientes, que al final acaban siendo mis compañer@s.
A.L. – ¿Qué consejo le darías a una persona que va a emprender?
A.E. – Antes de nada, que se lea ‘El Libro Negro del Emprendedor’ de Fernando Trías de Bes. Si como dice el autor, después de leerlo aún tiene ganas de emprender, ¡a por ello!
Eso sí, a no ser que su negocio sea estacional, que no lo haga en verano, hay negocios que se paralizan completamente y, si esto ocurre, no cobras.
A.L. – En tu día a día te dedicas a la optimización de procesos y a la innovación, campos muy necesarios para mantener la competitividad en las empresas, ¿cuáles crees que son los principales retos a los que se enfrentan en estos aspectos?
A.E. – La pequeña y mediana empresa, familiar, con la que trabajamos en Como Darwin tiene muchos desafíos que solventar.
Por una parte, está el tema de la gestión del tiempo. Viven enfocados en el día a día sin pensar en la estrategia de la empresa, hacia dónde quieren navegar y entran en una rueda que les impide dejar de apagar fuegos. El reto es que entiendan que tienen que parar a pensar cómo mejorar.
Además, tienen el reto de afrontar las nuevas formas de trabajo y la digitalización, muchas no saben qué se puede hacer con la tecnología, pero esta casuística es consecuencia de vivir día a día y no pensando en el futuro. Han trabajado así toda la vida y las cosas que han funcionado en otros tiempos, ahora ya no funcionan.
Por otra parte, la competencia que tienen es global, pero, al menos con las empresas con las que trabajamos, esto lo han sabido manejar gracias a la diferenciación y a la cercanía.
Puede considerarse que encontrar y retener talento puede ser otra acometida, pero yo en este caso, no lo he vivido. Dentro de los servicios que ofrece Como Darwin está el proceso de selección y onboarding de personas enfocadas a la Mejora Continua y no hemos hecho más de dos entrevistas con cada cliente que nos ha requerido este servicio. O se fían mucho de nuestro criterio o el talento está, solamente hay que saber bien qué buscas y nosotras no buscamos conocimiento, ni experiencia, buscamos actitud y le damos el conocimiento. La experiencia la adquiere en la empresa.
Por último, las regulaciones, el crecimiento o evolución continua que demanda el mercado o por ejemplo el acceso a financiación pueden ser también exigencias con las que tengan que lidiar.
A. L. – Quería aprovechar esta entrevista también para preguntarte, como mentora de nuestro Programa de Mentoring, ¿cómo has vivido todo el proceso de mentorización del proyecto que se te ha asignado?
A.E. – ¡Ha sido genial! Mi mentee… ¡es una crack! Aprendimos mucho la una de la otra, que al final es lo que me encanta de estos programas. Coincidió que yo estaba empezando con Como Darwin y lo que aplicábamos nosotras, por ejemplo, para definir y medir la estrategia de empresa que era lo que Consentido demandaba, lo validábamos también con María y su empresa. Fue un win-win, aplicamos metodologías ágiles y procesos a su gestión de paso que lo hacíamos en la nuestra.
De esto salió una gran relación personal y profesional; por ejemplo, Consentido fue quien diseñó la imagen de marca del festival Sensa promovido por el Círculo de Jóvenes Emprendedores, donde coordino un grupo de networking en la zona del Morrazo.
