La IV edición del programa de mentoring de IGATA también ha contado con Sofía Pérez como mentora de Brais Armiño y su proyecto atlantHy. Conocemos más de cerca su experiencia de la mano de nuestra compañera Leticia Río.
Leticia Río: Para los que no te conocen, ¿quién es Sofía?
Sofía Pérez: Soy una persona curiosa, inconformista y apasionada por lo que hago..algo que probablemente me caracteriza (ademàs de usar mucho el… “voy a darle una vuelta”) es el hecho de pensar que siempre hay algo nuevo que aprender y me gusta rodearme de personas con las que pueda compartir esa manera de pensar, compartir ideas, puntos de vista y experiencias. Impaciente por momentos y demasiado directa en ocasiones Soy de esas personas que persiguen “que las cosas pasen”. Mi carrera me ha permitido estar en contacto con proyectos de diferente índole (desarrollo producto, industriales, o negocio) además de construir y liderar equipos multidisciplinares. Me motivan los proyectos que buscan cambiar las reglas del juego desde el conocimiento, el trabajo en equipo y el compromiso. Trabajar en equipo es esencial para mí, ya que considero que es la mejor manera de sacar lo mejor de cada persona con la que colaboro
L.R: ¿Qué te motiva a inscribirte en nuestro programa de mentoring?
S.P: Sigo la trayectoria y trabajo de IGATA desde antes de volver a Galicia, creo que se hace un trabajo excepcional por dar visibilidad a las iniciativa de nuestro territorio. Tenía claro el que me encantaría participar de algún modo. El programa de mentoring, la verdad, me pareció una gran oportunidad, por cómo está estructurado, el mimo que se pone en todo el contenido y la flexibilidad del mismo, me animó. Además, en mi trayectoria he tenido la suerte de compartir tiempo con grandes profesionales y alguno de ellos los considero mis mentores… Me aportaron su visión, experiencia y consejo, lo cual me ayudó a crecer. Siempre he creído que el crecimiento personal y profesional se acelera cuando tienes a alguien que te acompaña en el camino, y poder aportar ese apoyo me parece algo importante. Además, me gusta ver cómo las ideas y experiencias (tanto buenas como malas), que se comparten, pueden ayudar a resolver dudas o desbloquear el potencial de los demás o abrir incluso nuevas vías de trabajo.
L.R: Estos procesos de mentoría suelen ser un win-win, ¿qué te llevas de esta experiencia?
S.P: La mentoría es una experiencia de doble vía, ¡sin duda! Me encanta ver cómo los proyectos avanzan y cómo las personas crecen durante el proceso. Siento que, al acompañar a otros en sus desafíos, también me estoy desafiando a mí misma a seguir mejorando y a mantenerme siempre en constante evolución. ¡Es un intercambio enriquecedor para ambas partes! También en cualquier proceso en donde se comparte conocimiento para mí es súper importante la actitud, la capacidad de escuchar, de reflexionar… para poder llegar a buen puerto.
“Esos retos son justamente lo que hace interesante la mentoría, esa reflexión acerca de las bases.”
Sofía Pérez
L.R: Con tu recorrido profesional y el enfoque de emprendimiento de Brais Armiño, ¿cuál es vuestro punto de encuentro?
S.P: Creo que lo que nos une a Brais y a mí es nuestra pasión por crear cosas nuevas, aportar valor real y por supuesto su preocupación por las personas. Yo he trabajado en proyectos que buscan transformar marcas, analizar conceptos, establecer planes de comunicación … y Brais tiene ese enfoque emprendedor que aporta una visión fresca y dinámica. Juntos, logramos conectar ideas y experiencias con las necesidades de AtlantHy, para establecer acciones a corto y medio plazo.
L.R: ¿Qué desafíos os habéis encontrado?
S.P: Yo que vengo de un mundo algo diferente, el primer desafío era ponerme en situación con la actividad de AtlantHy en relación al hidrógeno verde. Tanto Brais como Javier me pusieron al día enseguida para entender las bases de su negocio para, a partir de ahí, empezar a trabajar.
A pesar de que el proyecto está ya bastante avanzado, siempre surgen dudas, especialmente en temas específicos como la misión, visión y modelo de negocio, sobre todo porque conforme se crece este puede ir evolucionando. Pero esos retos son justamente lo que hace interesante la mentoría, esa reflexión acerca de las bases. No solo pudimos resolver esas dudas, sino que también trabajamos en mejorar la gestión de personas y en asegurar que todo el equipo esté alineado con los valores de la compañía, mejorar la imagen de marca, analizar puntos clave para su nueva web y ver las primeras líneas de su plan de marketing. La verdad que fue un trabajo intenso pero ¡muy fructífero!